El poder de la palabra es algo que parece pasar por alto la gente que comunica un pensamiento o idea en redes sociales. Al redactar un contenido se debe de ser cuidadoso con la idea de lo que se quiere transmitir y se debe de analizar realmente en la repercusión y el impacto que dicho contenido pudiera tener.
A veces eso que se escribe puede generar emociones de diversas índoles y pueden existir diferentes interpretaciones según se analice el contexto del enunciado.
Por ejemplo, en varios países de primer mundo, cuando se analiza un comentario en redes sociales que pudiera ser peligroso o que pudiera tener una repercusión negativa al punto de que afectara la seguridad nacional en ese país, este evento podría hacer que la persona que redactó ese texto pudiera llegar a tener hasta cárcel preventiva.
Y este artículo lo escribo porque hace un par de días, una piloto de la línea de aviones de Interjet escribió en sus redes sociales un comentario en Facebook que causó mucha molestia y temor a cierta parte de la población, ya que ella sugería lanzar una bomba en el Zócalo, en plenos festejos por el Grito de Independencia.
Honestamente, no creo que ella sea terrorista y pienso que ella está en todo su derecho a manifestar su inconformidad con el gobierno actual de México. Sin embargo, dudo mucho que ella haya analizado el impacto de sus palabras, es decir la forma en cómo impactaría su mensaje. Como lo hizo, no fue definitivamente, la manera más adecuada y acertada.
Actualmente, veo delicado que con las redes sociales en su auge, la gente no se ha dado cuenta del alcance y del poder de las palabras. Leo a muchos Twitteros y miro a muchos Youtubers que no entienden que estas "herramientas sociales" tiene un gran impacto en la sociedad a través de lo que se comunica y ese impacto es para bien o es para mal.
Muchas personas por redes sociales, expresan su inconformidad, pero también muchas veces lo transmiten con el hígado y no con el cerebro, y en ese sentido hay que tener mucho cuidado. Compartir ideas que promuevan violencia o desgracias no es correcto y puede llegar a ser peligroso. Antes de publicar algo, se debe de medir el impacto de las palabras, se debe de analizar lo que se escribe y finalmente darle clic a una publicación para que se vuelva pública. Una vez que un comentario es público, no hay vuelta atrás, y aquello que era personal, se esparce en todo el espacio público y lo hecho, hecho está.
Una vez que un comentario es público, no hay vuelta atrás, y aquello que era personal, se esparce en todo el espacio público y lo hecho, hecho está.
Aún recuerdo, cuando el año pasado el periodista Miguel Alemán, promovió en Twitter el siguiente mensaje: “A John Lennon lo mató un fan, A Versace lo mató un fan, A Selena la mató una fan, A ver a qué hora, chairos”.
Este mensaje era haciendo una alusión a que un seguidor o fanático de López Obrador debería de matarlo.
Aunque no creo que él haya tenido intenciones realmente de que se lastimara al candidato, al ser una persona que es pública porque su voz y palabras, así como sus publicaciones escritas se promueven a nivel nacional a través de diferentes medios de comunicación, pues esto es sencillamente es inaceptable y más por todos los años que ha estado en medios.
En el caso del periodista, quizás no era la intención de Alemán el querer que se asesinara a López Obrador pero sí mostrar su inconformidad con el entonces candidato. Sin embargo, Ricardo Alemán, no midió el impacto de sus palabras, y al ser una figura pública en medios de comunicación, esto le generaría problemas. El tuit era una muestra de odio, y más allá de que el periodista no compartiera la ideología del candidato, era una forma indirecta de incitar a la violencia y esto provocó que perdiera su trabajo.
Por otro lado, en el caso de la joven piloto, no creo que la investigación de Interjet a su empleada de para mucho, pero sí creo, que hay que tener cuidado en la manera como se quiere transmitir un mensaje. Ximena García, la piloto, se equivocó en la forma de expresar un mensaje y ahora debe de estar pasando por todo un proceso incómodo en su trabajo a la vez que seguramente se ganó varios "haters" que son PRO-AMLO... ¿Qué pasaría si alguno de esos fanáticos o seguidores del presidente tuviera algún tipo de problema psiquiátrico y decide matarla a ella porque la ve como una posible amenaza?...
Dudo mucho que estaría padre leer en una noticia que la piloto murió asesinada por "haber intentado matar al presidente" y menos, saber que todo eso fue generado por un comentario.
Al final, cada persona es responsable de lo que dice, piensa y hace... y por eso antes de decir o hacer, hay que pensar.
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